martes, 4 de septiembre de 2012

Soulmate

Que difícil es cada segundo de ignorancia, cada segundo que sé que tú no estás pensando en mí como yo en ti. Que días más raros... Estás tan sumamente distante que me asusto, sé que tienes que centrarte y encontrar tu propia paz, pero tengo tanto miedo de que me vuelvas a aborrecer, que vuelvas a cansarte de mí. Estoy cansada de sentirme tan sumamente insuficiente, tan por debajo de todo y de todos. Necesitaría otra vez tu sonrisa, ¿sabes? Esto a veces se pone demasiado cuesta arriba. El mundo es horrible cuando tú no estás, cuando estás En línea pero no estás hablando conmigo, cuando las conversaciones son cada vez más cortas. Anoche no hubo madrugada para mí. Por favor, amor, avisa cuando digas el definitivo adiós. No soportaría encontrarme en una despedida improvisada y no haber sabido disfrutar y saborear los últimos momentos. Por favor que esto no lo arruine todo, no quiero no estar a tu lado, no quiero echarte de menos, me niego. No aguanto este sin vivir que es no saber de ti. ¿Por qué das lugar a esto?¿Por qué te apagas? Dios, si al menos supiera que narices hay mal en mí para cambiarlo, estoy tan cansada de que se cansen de mí, de que me aborrezcan. Estoy tan cansada de cambios inesperados. Amor, encuéntrate a ti mismo. Estoy dispuesta a dejar que juegues conmigo si es lo que necesitas para encontrarte. Lo único que quiero es que seas consciente de lo que haces y de si es lo que quieres, pero por favor no cambies de repente porque me hundes el alma, que mi corazón está cada vez más pequeñito y estoy cansada de no entender absolutamente nada. Me gustaría que me echaras un poquito de menos, que en uno de esos ven yo pudiera ir y estar juntos, abrazarte y decirte que todo va a ir bien, que estés tranquilo que no me voy a ir de tu lado. Y que a ti te sirviera, sobretodo eso. Que respiraras tranquilo y me susurraras un gracias que yo entendería como un te necesitaba aquí.
No olvides nunca todas estas eternas conversaciones, no olvides nunca si un día te hice sonreír. Dale valor también a los pequeños detalles, son mi especialidad y sin ellos estoy perdida. Gracias por haberme dejado estar a tu lado, eres tanto... Amor, date una oportunidad. A ti y sólo a ti, no me importa si en ello me perjudicas, pero piensa, piensa en ti. Aprende que el mundo no va a hacer nada por ayudarte, necesitas salir adelante. Yo sólo soy una bala perdida buscando un rumbo, pero recuerda, ahora y siempre, que para cualquier cosa estoy dispuesta a parar mi camino y ayudarte, estoy dispuesta a detener el tiempo para hacerte feliz. Y confía en mí, no dejas tu felicidad en manos de cualquiera, daría la vida por una sonrisa tuya.
Confía.

No hay comentarios:

Publicar un comentario